La Dama en el Agua (Lady in the water)

Al director M. Night Shyamalan muchos lo odian, otros lo aman. En lo personal, su primer trabajo, El sexto sentido, me pareció una muy buena película, pero los siguientes (Señales, El protegido y la Aldea) aunque con sus cosas interesantes, no me entusiasmaron demasiado.

Esta, su última producción (dirección y guión como en las otras) es, ciertamente muy diferente a las otras, si bien mantiene el mensaje de esperanza y fe que transmiten sus otros guiones. Y es que este fue resultado de una historia que se inventó como "bed time story" para sus hijos.

Por tanto, estamos hablando de una fábula, del terreno de la ilusión, fantasía, ingenuidad y arquetipos, vamos, lo que es una fábula. Sin embargo a diferencia del Laberinto del Fauno, una muy buena película que mezcla fantasía y realidad, que es una fábula dentro de la historia moderna, esta es una fábula moderna con tintes clásicos.

Los personajes son totalmente estereotipados y en realidad sólo hay cierta profundidad en el principal, el concerje tartamudo, Cleveland Heep (Paul Giamatti), pero es que las fábulas son así, no buscan interiorizar y profundizar en sus personajes, no buscan complejas tramas psicológicas o finales inesperados, no, las fábulas clásicas buscan, a través de unos personajes arquetípicos, contar una moraleja.

Si bien esto puede llegar a ser desilusionante para quien busca ver una nueva película con el estilo de las anteriores, sobre todo porque esa ingenuidad y personajes tan típicos y tópicos, puede llegar a hartar, si no se va con una mentalidad de ver lo que es. Vaya, que los personajes se toman, incluso, demasiado fácil el hecho de que existan seres de un cuento de hadas, como la ninfa o Narf (y no, no es una exclamación de Pinky), sin cuestionarlo siquiera un poco, como sería natural en esta época donde la incredulidad y el escepticismo están a la orden del día, que al final, es la época histórica donde nos situa.

La historia es simple, la Narf, llamada Story, viene a dar inspiración, cual musa, a un escritor que logrará una obra trascendental, que en la mente de un gran lider, será el principio de una revolución ideológica sin precedentes, Vick Ran (Claro algo pretencioso y megalómano, que el papel de ese escritor lo haya interpretado el mismo Shyamalan; pero dejemos que cada quien tenga sus delirios de grandeza) Para hacer llegar su mensaje al escritor, utiliza la ayuda de Heep, el concerje, cuya misión, no sólo será encontrarlo, sino también juntar, del condominio donde trabaja, que es una especie de aldea global, con toda suerte de razas viviendo juntos, a una serie de personajes para salvar la vida de Story, que en su intento de regresar a su reino mágico, es atacada por un scrunt, una especie de lobo con pelo de pasto, que sólo es visto en el reflejo de un espejo.

La moraleja de la historia es la esperanza, la fe, el humanismo que ha distiguido al director/guionista en sus obras, pero contada de una forma ingenua, pero agradable.
Bajo mi punto de vista, lejos está de superar al Sexto Sentido, pero al menos me gustó más que las otras películas que ha hecho.

Muy cómica el guiño que hace al ser, la primera víctima mortal del scrunt, un crítico de cine, insufrible; como una especie de burla a las críticas que ha llevado su obra.

En fin, una película para soñar un rato, sin mayores pretenciones. Posiblemente la vea otra vez, pues lamentablemente no la vi en el cine, sino en un avión, durante mi regreso desde Italia y la pantalla es sumamente pequeña, aparte de varias interrupciones a la mitad del atlántico, para que el capitán nos dijera que nos abrocharamos los cinturones, después de que ya andabamos saltando por las turbulencias. La otra película que vi, pero de ida, fue "El diablo viste a la moda" una entretenida comedia palomera, sin mayor cosa que comentar.